En otras palabras, situa la dimension del sexo igual que la alteridad de el goce mujeril

Lo que Lacan dice sobre una manera bastante radical podri­a ser el sexo seri­a lo mujeril: «el sexo en mi ensenanzas se entiende como lo femenino». asi­ como seri­a Asi que que, dira para terminar en “L’etourdit”, la orientacion heterosexual, ya sea un varon o una chica, es amar an una femina, en la grado que hace presente esta alteridad de el goce de cada individuo. Ese es todo el problema, ?como amar algo de el goce hetero que Se Muestra en un adulto asi­ como en una femina sobre distinta manera?

Estaria de acuerdo con la idea de que invariablemente estamos expuestos a procurar dar la maneras a lo que nunca dispone de maneras de lo femenino. Es ademas intentar “terapeutizar” lo que nunca se puede curar en un ligado -y que para terminar aparece como lo incurable-. Es en eso que existe que autorizarse para terminar. En la grado en que el analista se autoriza en lo mujeril, va a contracorriente de la pendiente psicoterapeutica.

El superyo, mujeril

La observacion de la identidad entre goce mujeril y superyo mujeril seri­a un equivoco sobre lo femenino, asi­ como en el superyo Ademas. Jacques-Alain Miller hizo una buena elaboracion acerca de ello al aseverar que Existen que diferenciar al superyo de el goce como mujeril. Una diferente cosa es que el contratiempo de el goce femenino se le plantea a veces al varon sobre modo insoluble, se transforma en una jurisprudencia que se contradice todo el tiempo a si misma. Al Modalidad sobre: mismamente igual que el padre deberias ser, de este modo como el pater no deberias ser, que seri­a como Freud lo formula en «El yo asi­ como el ello». Resulta una antinomia imposible sobre solventar.

Hemos observado que en esta dimension de lo femenino aparece un real desprovisto normativa, Con El Fin De retomar la expresion sobre Lacan. El ligado viril En muchas ocasiones intenta efectuar de eso una normativa de hierro. y por lo tanto si, Tenemos alla una conexion directa dentro de el superyo asi­ como lo femenino Incluso el tema de que podemos perjudicar al superyo igual que mujeril. No obstante no deberia igualarse al goce mujeril como tal, seri­a justamente muy joven sexy italiano adolescente chica lo opuesto. Lo que hemos dicho de el goce femenino es que seri­a un lugar que nunca se permite representar por las fronteras del jerga o de la jurisprudencia misma.

1. Lacan, Jacques, El Seminario texto 19, “ou pire”, pag. 118. Paidos, 2012.
2. Ob. cit.
3. Lacan, Jacques, Ideas directivas para un congreso en la sexualidad de la mujer, Escritos 2, Ed. Siglo XXI, 2010. pag. 695.
4. Miller, Jacques -Alain, El ultimisimo Lacan, Los Taller Psicoanaliticos de Jacques: Alain Miller, Paidos, 2012, pag. 158.

Autorizar lo femenino

Hemos pasar de la logica de el borde como limite, a la logica de el borde como litoral, operacion que Lacan indicara especialmente en su texto «Lituraterre», sin embargo igualmente en el Seminario 19. Cuando Tenemos una limite entre dos paises, eso supone una reciprocidad, se podri­an establecer vinculos, representaciones reciprocas, igual que por ejemplo consulados. Tenemos un «entre» los 2 campos. Aqui el limite funciona como una frontera, No obstante facilita tambien una reciprocidad. La idea que Lacan introduce con el litoral cambia totalmente esta concepcion espacial, porque el litoral supone que no existe un lugar «entre» concebible. Al completo un ambito, -dice Lacan- hace de frontera de el otro, desprovisto margen. Una practica parecida pudo haber tenido Cristobal Colon, en la ocasion de lanzarse al os de litoral nunca Tenemos «entre», nunca Existen reciprocidad ni existe relacion proporcional posible dentro de las 2 espacios. Esta seri­a la nunca relacion entre las sexos, producida debido a femenino igual que el lugar litoral identico, igual que alteridad radical en el ambito del goce. Lo femenino no sabe de fronteras. y el tango da la impresion moverse en ese lugar mas alla del falocentrismo, que podri­amos aclarar hoy por hoy entre nucleo asi­ como desaparicion, sin frontera ni reciprocidad.